NOMBRE OBRA: Atracció Miramiralls.
AUTOR O ARQUITECTO: Varios Arquitectos. Dani Freixes, Lali González, Vicenç Bou, Vicente Miranda, arquitectos.
AÑO: 2009
FOTOGRAFO: Mihail Moldoveanu
SITUACIÓN GEOGRAFICA: parque de atracciones del Tibidabo, Barcelona.
DESCRIPCIÓN: Con la aplicación de espejos ópticos y nuevas tecnologías, propone un recorrido a través de una serie de escenas que tienen como objetivo enseñarnos a mirar. Así, por ejemplo, podemos ver cómo una calabaza se transforma en una carroza o un sapo en una corona. Durante el paseo, nos cruzamos con un almacén infinito de juguetes o un cielo estrellado. Al final, una sala donde se encuentran los espejos de siempre, cóncavos y convexos, de la histórica sala de espejos del Tibidabo.
La propuesta presenta un recorrido a través del cual se va descubriendo una serie de espacios en los que se van sucediendo momentos mágicos, propios del mundo de la ilusión y la fantasía.
MATERIALES: Espejos, iluminación en forma de Leeds, aluminio, telas y madera.
COMENTARIO DE LA OBRA
Este tipo de intervenciones efímeras son muy valoradas por su parte dinámica, por la aportación a todo tipo de edades.
Esta atracción llevaba construida mucho tiempo, pero desde esta intervención a cambiado mucho, le da un toque más misterioso, con unos puntos más interesantes, y no centrando toda la atención a el efecto de los espejos en las personas sino también en la transformación de elementos por efectos de espejismo. El equipo de arquitectos menciono unas condiciones para atreverse a entrar en la atracción:
No se debe tener miedo.
Se debe tener imaginación.
Se deben buscar nuevos caminos y afrontar el misterio.
Se ha de amar la geometría.
Se debe saber mirar las estrellas.
Se deben tener deseos.
Se debe saber guardar recuerdos y secretos.
Ganadora por la magia, la imaginación y el dominio de las ilusiones ópticas al servicio de una atracción del Tibidabo concebida para hacer reir y pensar a los niños.
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